Toma mi mano
Toma mi mano y camina a mi lado en este oscuro páramo que nos lleva a misteriosos pasajes.
Camina junto a mi que yo no te soltare ni por el mas pequeño milisegundo, aunque mi mano tiemble y se acalore. Tu mano tan pequeña comparada con la mía unida con nuestros dedos entrelazados.
Mis manos grandes, torpes, fuertes y estridentes acojen a las tuyas largas y delicadas como pétalos en primavera.
Tomo tu mano por que no te quiero dejar ir hoy y por que quiero que todos sepan que eres mi significado en este enredo de versos.
Toma mi mano y camina conmigo que te llevare a pasajes desconocidos en noches irrepetibles.
Toma mi mano y mi mundo se convertirá en nuestro universo.
Toma mi mano que yo no te soltare y de eso puedes estar tan segura como que la noche es el enredo de los amantes y el amanecer el ocaso de un eterno amor.
Tuyo, David.
Tristezas, sueños, palabras rotas, notas sin entregar, todo plasmado por medio de la liberación dada por la escritura de poesía irreverente y escondida para aquello que pudo y no fue.
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lunes, 31 de agosto de 2015
martes, 11 de agosto de 2015
Desasosiego
Desasosiego.
No te vayas ahora que tengo miedo.
No te vayas ahora por que tengo miedo de perderte en la infinidad de los minutos que recorren nuestro mundo.
No te vayas ahora que mi mundo se desvanece con cada milisegundo de este atardecer.
No te vayas ahora que llorare tu partida en el ocaso de nuestro extraño amor.
No te vayas que te quiero acá a mi lado hoy, mañana y pasado mañana.
No te vayas que mi nariz, mis oídos, mis sentidos te extrañaran por siempre en las noches frías que no estarás nunca mas.
No te vayas, simplemente no lo hagas y quédate así, como estas ahora, tan natural , tan despeinada, tan extraña que me amañas las mañanas.
Tuyo, David.
No te vayas ahora que tengo miedo.
No te vayas ahora por que tengo miedo de perderte en la infinidad de los minutos que recorren nuestro mundo.
No te vayas ahora que mi mundo se desvanece con cada milisegundo de este atardecer.
No te vayas ahora que llorare tu partida en el ocaso de nuestro extraño amor.
No te vayas que te quiero acá a mi lado hoy, mañana y pasado mañana.
No te vayas que mi nariz, mis oídos, mis sentidos te extrañaran por siempre en las noches frías que no estarás nunca mas.
No te vayas, simplemente no lo hagas y quédate así, como estas ahora, tan natural , tan despeinada, tan extraña que me amañas las mañanas.
Tuyo, David.
lunes, 3 de agosto de 2015
A esa hora.
Esa hora
18:00
Esa hora tan tenebrosa y amarillenta que me llena con su mágica penumbra, es calma, es armonía.
Tan tranquila que relaja los pesares de todo un día, todo parece ir mas lento y no es una ilusión de desaliento, es la paz que me rodea en su mas infinita presencia.
Son las seis de la tarde y la luz del largo día se opaca un poco más, frías corrientes viajan por los aires llamando a la noche que abraza la tierra con su suave manto.
Las luces se encienden aquí y allá y en estas montañas todo se empieza a iluminar.
Esta es la hora de los holas y adioses de sentimientos encontrados en variados umbrales, la hora de los abrigos y las bufandas.
La hora de los niños y de los gatos, la hora del trabajador agotado, la hora del silencio interrumpido, la hora mas nítida.
Tuyo, David.
18:00
Esa hora tan tenebrosa y amarillenta que me llena con su mágica penumbra, es calma, es armonía.
Tan tranquila que relaja los pesares de todo un día, todo parece ir mas lento y no es una ilusión de desaliento, es la paz que me rodea en su mas infinita presencia.
Son las seis de la tarde y la luz del largo día se opaca un poco más, frías corrientes viajan por los aires llamando a la noche que abraza la tierra con su suave manto.
Las luces se encienden aquí y allá y en estas montañas todo se empieza a iluminar.
Esta es la hora de los holas y adioses de sentimientos encontrados en variados umbrales, la hora de los abrigos y las bufandas.
La hora de los niños y de los gatos, la hora del trabajador agotado, la hora del silencio interrumpido, la hora mas nítida.
Tuyo, David.
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